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¿Qué es la potencia contratada y qué potencia de luz contratar?

¿Qué es la potencia contratada?

La potencia contratada es la cantidad de energía que se puede utilizar para conectar aparatos eléctricos. Es decir, es el número de electrodomésticos que tu suministro es capaz de aguantar (a la vez) sin que “salten los plomos”.

La potencia eléctrica contratada con la empresa de luz varía en función de las necesidades del hogar y del número de personas que vivan ahí; normalmente, cuantas más personas y/o aparatos conectados simultáneamente, más potencia se necesita contratar y, por ende, más sube la factura de la luz.

La relación entre energía y potencia es que la potencia es la velocidad a la que se consume la energía. Entonces: 1 joule / segundo = 1 Watt: la unidad de medida de la potencia.

La potencia de la luz se mide en kilovatios (kW), y así lo encontrarás en la factura de la luz junto al precio en euros de cada kW.

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¿Cómo saber la potencia contratada?

Saber la potencia contratada en tu hogar es fundamental para asegurarte de que estás pagando solo por lo que realmente necesitas.

  1. Consulta tu factura de electricidad: El método más sencillo es revisar tu última factura de electricidad. En ella encontrarás un apartado que suele llamarse «Potencia contratada» o «Detalles del contrato». Esta sección te indicará el valor en kW (kilovatios) que tienes asignado. Generalmente aparece en la parte superior o junto a otros datos como el número de contrato o el CUPS (Código Universal del Punto de Suministro).
  2. Accede al área de cliente de tu comercializadora: Si prefieres una opción digital, la mayoría de las comercializadoras eléctricas ofrecen un portal online. Una vez registrado, puedes acceder a los datos de tu contrato, incluyendo la potencia contratada. Busca en secciones como «Mi contrato», «Mis servicios» o «Consumo energético».
  3. Revisa el boletín eléctrico: Si no tienes acceso a tu factura o al portal de cliente, también puedes consultar el boletín de instalación eléctrica de tu vivienda o negocio. Este documento, elaborado por un electricista autorizado, incluye la información técnica de tu instalación, como la potencia que puedes contratar según la normativa vigente.
  4. Llama a tu compañía eléctrica: En caso de duda, siempre puedes contactar directamente con tu compañía eléctrica. Ellos te proporcionarán toda la información necesaria sobre tu contrato, incluyendo la potencia que tienes contratada y las posibles opciones para modificarla.
  5. Medición del ICP o maxímetro: En instalaciones más antiguas, la potencia contratada se puede controlar a través del Interruptor de Control de Potencia (ICP), que cortará el suministro si sobrepasas el límite contratado. Si tu instalación es más moderna, puedes contar con un maxímetro, que mide el consumo en tiempo real y puede ofrecerte datos precisos sobre tu consumo máximo.

Asegurarte de tener la potencia adecuada puede evitarte pagar de más o sufrir cortes de luz por sobrecarga. Si crees que la potencia que tienes contratada no se ajusta a tus necesidades, es recomendable que contactes a un técnico especializado para evaluar tu consumo energético y hacer los ajustes necesarios.

¿Qué potencia de luz contratar?

Para saber qué potencia contratar, el usuario deberá ajustarse a las potencias normalizadas, iguales para cualquier comercializadora. La potencia que tienes contratada actualmente figura en tu factura de la luz, y si estás pensando en subir o bajar la potencia, consulta nuestro artículo del blog: ¿Qué potencia contratar?

No obstante, y aunque bajar la potencia es un muy buen método de ahorro, no siempre es posible. Piensa que la potencia contratada depende de tus necesidades, de modo que te recomendamos que la ajustes al máximo sin pasarte ya que, si no, te saltarán los plomos cada vez que la sobrepases.

De todos modos, es importante recalcar que, en ocasiones, que puedas bajar la potencia no depende tanto de la cantidad de energía que consumas sino de cómo y cuándo la consumes.

Ejemplo práctico para saber qué potencia eléctrica contratar

Situación 1: Decides usar el horno para cocinar y, de paso, con el tiempo que te ahorras, aprovechas para poner la lavadora mientras planchas. A todo esto, está la tele de fondo y los electrodomésticos de siempre funcionando: las luces, la nevera y quizás algún calefactor. Todo a la vez.

Situación 2: Decides usar el horno para cocinar y, de mientras, te relajas viendo la tele. Una vez terminas de cocinar, programas la lavadora para que se ponga en marcha justo cuando acabes de planchar.

Evidentemente, en la situación 2 también están las luces, la nevera y quizá el calefactor encendidos, pero a diferencia de en la situación 1, el consumo no se efectúa a la vez, con lo que no hay una demanda elevada de potencia y probablemente quede margen sobrante, el que podrías reducir.

Es decir, si pasas de la situación 1 a la situación 2, puede que puedas bajarte la potencia, pero eso sí, ten en cuenta que de hacerlo, si conectas varios aparatos a la vez como en el primer ejemplo te saltarían los plomos.

Desde Factorenergia te recomendamos que prestes atención a tus hábitos de consumo y estudies si es viable cambiar algunas costumbres.  Una vez lo tengas claro, y si quieres cambiar de compañía de luz para hacer el cambio de potencia más fácil, llama a nuestro teléfono gratuito de Atención al Cliente al 900 850 000 o contrata la luz online con Factorenergia; serán solo 3 minutos, garantizado.

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¿Cómo calcular la potencia necesaria para tu casa?

Si no tienes luz contratada

En caso que todavía no hayas contratado un suministro, lo mejor será que busques el boletín eléctrico. Se trata de un certificado que avala que la instalación eléctrica está en buen estado, qué tipo de instalación tienes y la potencia máxima que puede soportar, junto con la recomendada. No te compliques, compara precios y llama a un técnico electricista. Si el boletín eléctrico tiene más de 20 años de antigüedad, un instalador electricista autorizado deberá emitir uno nuevo.

Si ya tienes luz en casa

En caso de que ya tengas suministro y quieras comprobar que la potencia contratada es la adecuada para ti, lo primero es saber qué potencia tienes ahora mismo. Si no lo sabes, lo encontrarás en cualquier factura de la luz.

Una vez lo sepas, necesitarás comprobar si ésta se adapta a tus necesidades. Recuerda que, si te saltan los plomos a menudo sabrás que tu potencia eléctrica es demasiado baja.

Para saber qué potencia eléctrica necesitas deberás calcular el máximo de kW que vas a demandar a tu red eléctrica en un mismo momento. Tendrás que pensar en todos aquellos electrodomésticos que utilizas o puedas utilizar en estaciones concretas, de manera simultánea.

A continuación te mostramos la potencia aproximada (kW) que necesita cada uno de los electrodomésticos de tu hogar cuando los enciendes:

 

potencia eléctrica electrodomésticos

 

Haz una lista de los que sueles usar y suma los valores en kW. A ese resultado, súmale 1kW en concepto de iluminación y divide el total entre 3. El resultado debería ser cercano a tu potencia contratada. Si no es así, seguramente necesitarás pedir un cambio de potencia. Con este método podrás hacer una estimación de la cifra de kW más alta que vas a pedirle a tu instalación eléctrica.

También puedes saber qué potencia necesitas usando un medidor. Existen herramientas que miden el consumo eléctrico de un aparato en concreto si es individual, o de toda la casa, si es de consumo total. Los primeros cuentan con una entrada en la que enchufar el aparato que quieras medir, y los últimos se instalan en el cuadro eléctrico y miden el consumo global. Un medidor mostrará el valor máximo de consumo, que será la potencia eléctrica ideal para tu hogar. Y  recuerda:

Más potencia eléctrica contratada es más gasto

Cuanto mayor sea tu potencia contratada, mayor será el importe fijo que pagarás cada mes en tu factura. Por eso reducir potencias eléctricas demasiado altas e innecesarias, es una buena opción para hacer un uso responsable y ahorrar en tu factura de la luz.

Pero… menos potencia eléctrica no siempre es sinónimo de ahorro

Reducir la potencia eléctrica te puede hacer ahorrar, pero ese ahorro no te compensará si al bajarla te quedas corto y constantemente “saltan los plomos”.
Si ocurre, será necesario pedir una subida de potencia eléctrica, y esto tendrá un coste, de manera que querer ahorrar puede acabar saliendo caro. Tú decides, pero no te precipites y analízalo bien.

Elije tu tarifa de luz con factorenergia

¿No sabes qué tarifa de luz contratar? En factorenergia queremos ayudarte a ahorrar. Por ese motivo, además de resolver las dudas que te puedan surgir acerca de la potencia eléctrica que necesita tu hogar, te ofrecemos la luz al mejor precio con nuestras tarifas.

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